Mortarion, Señor de la Death Guard, lleva diez mil años aplastando a sus enemigos en el campo de batalla. Envuelto en parloteantes parásitos daemónicos, moscas zumbonas y nocivos vapores pestilentes, Mortarion llega volando al combate con sus alas enormes, unas alas cuyo batir estruendoso llena al enemigo de un temor lacerante, al tiempo que el hedor de la muerte se extiende a lo largo y ancho de sus líneas. Soportar siquiera la presencia del Señor de la Muerte es letal, pues sus oponentes tosen y caen tendidos al suelo antes de sucumbir a la miríada de enfermedades letales que flotan en el ambiente que lo rodea.

Este kit de plástico multicomponente contiene las piezas necesarias para montar a Mortarion, Primarca Daemon de Nurgle. Se trata de una gigantesca… miniatura (aquí la palabra “miniatura” se queda corta), ya que se impone al resto de la Death Guard ¡e incluso proporciona a los Bloodthirsters motivos para levantar la vista! Va cubierto por una servoarmadura barroca llamada Armadura barbarana, cubierta de mugre y herrumbre, con cráneos, pinchos y el simbolismo de Nurgle en todos sus protuberantes componentes. La túnica descompuesta, las cadenas y una capucha que le cuelgan de la armadura cubren parcialmente la red de tuberías que alimentan su sistema respiratorio. No es arriesgado afirmar que el respirador no le proporciona aire precisamente fresco, sino más bien esporas y enfermedades viles. Va armado con dos armas malignas: Silencio, una enorme guadaña cuya hoja, tan herrumbrosa como afilada, se compone de una desapacible sierra manchada con la sangre de mundos, capaz incluso de atravesar a un Reaver Titan como si fuera de papel; y Linterna, una antigua pistola de energía. Hay dos opciones de modelado para estas armas: una muestra ambas a los costados de Mortarion; la otra contempla una postura más agresiva.

Mortarion tiene alas ajadas de gran envergadura, repletas de agujeros, rasguños y manchas que representan el horror y el deterioro de las hordas de Nurgle. Hablando de las hordas de Nurgle, este kit incluye un sinfín de piezas adicionales: 2 Nurgling Drones con bombas de fósfex cuelgan de cadenas de la armadura de Mortarion, y hay otros tres en la peana: 1 lleva un icono del Chaos, otro columpia un incensario y el tercero lleva un contenedor repleto de sustancias horribles en las que no vamos a ahondar. La peana está repleta de rocas a las que corrompe la sola presencia inmunda del Primarca Daemon.

Mortarion, Daemon Primarch de Nurgle, contiene 78 piezas e incluye una peana redonda Citadel de 100 mm.